- El aproximado de nuevos empleos generados durante la gestión del primer mandatario es de 259,000, según la tasa de ocupación en la ENCFT.
- Durante esta gestión de gobierno, año tras año, se aplicaron más de una decena de aumentos en el salario mínimo de diferentes sectores.
- Las intenciones de Luis Abinader de regular el trabajo doméstico remunerado estuvieron planteadas en su plan de gobierno para la gestión de 2020-2024, pero aún no se concretan.
Categoría: Trabajo decente
Tema: Garantía de Derechos Laborales
Autora: Yadimir Crespo
La recuperación de los puestos de trabajo tras la pandemia por covid-19, la creación de nuevos empleos y los frecuentes aumentos salariales fueron varios de los hitos del presidente de la República, Luis Abinader, quien logró la reelección en los comicios de mayo pasado. Pero el primer mandatario va rumbo a iniciar un segundo mandato con compromisos y promesas que quedaron pendientes tras esta primera gestión gubernamental.
Objetivo principal: empleos
Desde la campaña electoral, Abinader estableció como “prioridad” y objetivo principal la creación de empleos. Tras la recuperación de los empleos perdidos durante la crisis sanitaria por covid-19, este gobierno alcanzó las tasas más altas de ocupación en la última década, según datos de la Encuesta Nacional Contínua de Fuerza de Trabajo (ENCFT).
La población ocupada registrada en el primer trimestre de 2020, previo a la pandemia, era de 4,605,874 personas. En el mismo período, pero de 2024, se registran 4,941,183 personas ocupadas en el mercado laboral dominicano.
Se recuerda que con la crisis sanitaria se perdieron alrededor de 400,000 empleos. Una vez recuperados, el aproximado de nuevos empleos generados durante la gestión del primer mandatario es de 259,000, un número que no alcanza ni la mitad de la cifra que aspiraban: 600,000.
Otro de los objetivos de Luis Abinader era reducir la informalidad laboral, pero lo que se observó fue un aumento. La ENCFT registra un ascenso de 2,531,449 ocupados informales en el primer trimestre de 2020 a 2,746,843 ocupados informales en el mismo periodo, pero de 2024. Lo que equivale a 215,394 nuevos ocupados informales en estos cuatro años.
Ahora bien, no es solo tener más empleos, sino también que las condiciones de estos sean más favorables para los trabajadores y sus familias, en propias palabras del reelecto presidente.
Salarios
Durante esta gestión de gobierno, año tras año, se aplicaron más de una decena de aumentos en el salario mínimo de diferentes sectores.
Entre los más destacados: de los trabajadores del sector azucarero, con 101.8% para los trabajadores agrícolas y 97% a los administrativos; mientras que para el sector turismo se aumentó el salario mínimo entre un 20% y un 49%.
Otros aumentos corresponden a docentes, los trabajadores del sector privado no sectorizado, los trabajadores del sector zonas francas industriales, los operadores de máquinas pesadas y otros trabajadores de la construcción. También a los trabajadores de las asociaciones incorporadas sin fines de lucro que prestan servicios de salud, educación, rehabilitación de personas con discapacidad y servicios a terceros en condiciones de gratuidad.
Gracias a esto, según el jefe de Estado en su última rendición de cuentas, durante esta gestión “se ha verificado un crecimiento de un 15 % del salario mínimo real, es decir, luego de descontar la inflación”.
Sin embargo, una de las demandas de Polétika RD que continúan sin ser cumplidas es la redefinición de la política salarial, que permita anclar los salarios al coste de la canasta básica establecida por el Banco Central y el incremento de los salarios por ajuste inflacionario anual automático y por productividad laboral ganada como mecanismo de ajuste salarial oficial.
Igual salario por el mismo trabajo
En 2023, el Banco Mundial publicó un estudio en el que señala que “para poder lograr un crecimiento inclusivo y maximizar la reducción de la pobreza en la República Dominicana se requiere cerrar las brechas de género existentes”.
La publicación, realizada a partir de los resultados de la Encuesta Nacional Continua de Fuerza de Trabajo de 2019, también establece que en promedio el hombre gana 27% más que las mujeres en el país. Aunque en un documento publicado en 2022 por el Programa de las Naciones Unidas por el Desarrollo, la brecha salarial se posiciona en un 18% entre hombres y mujeres.
Conscientes de esta realidad que precede al actual gobierno, a principios de diciembre de 2022 se lanzó a nivel nacional la Iniciativa de Paridad de Género (IPG-RD), una plataforma de colaboración público-privada que, entre sus objetivos, busca reducir la brecha salarial de género, la cual se ubica en 21.7% en su portal web. No obstante, República Dominicana se incorporó a esta iniciativa a finales del año 2018 y en 2019 se aprobó un plan con 11 acciones concretas para contribuir a reducir brechas económicas de género.
Pero lo cierto es que el país requiere de la eliminación de las brechas salariales por cualquier tipo de condición, no tan solo por género; así como también necesita el establecimiento de sanciones para las empresas privadas e instituciones públicas que incumplan la disposición.
Según el presidente Abinader, esto se logró y fue gracias a políticas para la reducción de la brecha de género y de edad que afecta a sectores vulnerables como las mujeres y los jóvenes.
En la más reciente rendición de cuentas aseguró: “Hoy, del total de la población ocupada en empleos formales privados, 616,192 son jóvenes entre 18 a 30 años; esto representa un 37.2% de la población total ocupada, un crecimiento del 37.6 % en relación con el 2020, cuando este indicador se colocaba en 447,913 personas jóvenes. Adicionalmente, el 66.4 % de todos los empleos creados en el último trimestre del 2023 corresponden a personas menores de 35 años”.
Reforma laboral, asignatura pendiente
Días antes de que el primer mandatario obtuviera la reelección en los pasados comicios de mayo, reconoció que en el país hay “muchas reformas pendientes”, entre ellas la laboral.
El ministro de Trabajo, Luis Miguel de Camps, anunció en mayo que para los meses de verano se presentaría la propuesta de reforma ya firmada por el sector tripartito: gobierno, empleadores y trabajadores. Aunque no es la primera vez que el ministro responsable de esta cartera afirma que para los próximos meses ya estará lista la propuesta de modificación del Código de Trabajo.
Un aspecto positivo es que el funcionario aseguró que ninguno de los actores del tripartito propuso la eliminación de la cesantía.
Iniciada la cuenta regresiva para el inicio del nuevo mandato de Luis Abinader, la regulación del mundo laboral dominicano con una legislación del siglo pasado parece estar cerca de su fin. Pero queda el desafío de adecuar las leyes y establecer protocolos para la prevención y la sanción de la violencia y acoso sexual y laboral en el trabajo.
En su informe de favorabilidad para la adhesión del Estado Dominicano al Convenio 190 de la OIT, el Ministerio de la Mujer señala que en República Dominicana no está reconocido, ni tipificado en la normativa penal y laboral el acoso como figura jurídica o como un tipo especializado de violencia, ya que actualmente solo se reconoce el acoso en su manifestación sexual, a través de la Ley 24-97.
Por lo que aún es necesaria y también está pendiente la ratificación del Convenio 190 de la OIT, sobre violencia y acoso en el mundo del trabajo.
Derechos de los trabajadores y trabajadoras domésticas: ¿en pausa?
Las intenciones de Luis Abinader de regular el trabajo doméstico remunerado estuvieron planteadas en su plan de gobierno para la gestión de 2020-2024, en el cual incluía establecer un sistema de protección del trabajo doméstico remunerado, así como también dar cumplimiento al Convenio 189 de la OIT sobre el trabajo decente para las trabajadoras y los trabajadores domésticos.
En la búsqueda de proteger sus derechos humanos y propiciar condiciones justas de empleo, de salario y de jornada de trabajo, en septiembre de 2022 anunció la formalización de un acuerdo que establecía el registro de las trabajadoras y los trabajadores domésticos en la Tesorería de la Seguridad Social (TSS).
Se trata de la Resolución número 551-08, emitida en agosto de ese año por el Consejo Nacional de la Seguridad Social (CNSS), mediante la cual se creó un plan piloto como mecanismo para la inclusión de las trabajadoras domésticas al Sistema Dominicano de la Seguridad Social (SDSS) por cuenta propia, bajo el régimen contributivo subsidiado.
También, mediante la Resolución 11-2022 del Comité Nacional de Salario, se estipuló que el salario mínimo sería de RD$10,000.00, a ser pagados en períodos no mayores de un mes. Para ello, sería necesario además la existencia de un contrato firmado por ambas partes que fije el tipo de trabajo a realizar, el horario, salario y periodo de vacaciones.
Al menos así lo manifestaba la Resolución 14-2022 del Ministerio de Trabajo, que alrededor de diez meses más tarde fue anulada por el Tribunal Constitucional, en junio de 2023, ya que “viola el ordenamiento jurídico”.
En su momento, el primer mandatario expresó que el gobierno buscará “la forma legal y constitucional para hacer justicia” con las empleadas domésticas.
Para mayo de 2023 se contabilizaban 582 trabajadores: 527 mujeres y 55 hombres registrados en la Tesorería de la Seguridad Social (TSS) como parte del plan piloto que había lanzado y que terminó siendo anulado por otra sentencia del Tribunal Constitucional, dejando nueva vez al grupo de la población que se dedica a este oficio acogiéndose a las legislaciones que siempre le han regido.
Cerrar este cuatrienio sin lograrlo es incumplir con una de las propuestas de Abinader en su programa de gobierno para la gestión de 2020 a 2024: “Establecer un sistema de protección efectiva para el trabajo doméstico remunerado que garantice los derechos fundamentales del trabajo, la protección efectiva contra toda forma de abuso, acoso y violencia en el lugar de trabajo y acceso a seguridad social”.